Ese es el gran deseo tanto de la Federación Española de Baloncesto como del propio jugador. Por ello se ha vuelto a retomar el proceso de nacionalización del congoleño, que había quedado en punto muerto desde el pasado mes de septiembre.
Ahora bien, la cosa no será sencilla. El primer gran inconveniente está ya solucionado y era que ni Ibaka ni su familia encontraban su partida de nacimiento. Al final el padre de Ibaka logró hacerse con ella tras realizar diversos papelos en la embajada del Congo en París.
Una vez conseguida la partida de nacimiento la FEB tiene previsto presentar este mismo martes todos los documentos necesarios para lograr que Ibaka se convierta en ciudadano español por el proceso de carta de naturaleza que otorga el Gobierno mediante Real Decreto en circunstancias excepcionales.
A partir de ahí comenzará todo un baile de papeleos y entresijos burocráticos como entrevistas personales con el ala-pívot congoleño. Además, Ibaka debería jurar la Constitución española. El principal problema al que se enfrentan es el tiempo. La idea es que Ibaka pueda estar disponible para Scariolo para el próximo europeo de Lituania que se disputará este verano.
Todo este proceso no tiene un plazo fijo y varía en cada caso y jugador. Por ejemplo, con el madridista Nikola Mirotic se tardaron dos años hasta conseguirlo. Aunque hay motivos para la esperanza porque en el caso de Sancho Lyttle, jugadora del Permuferías Avenida, la nacionalización se demoró algo más de medio año, tiempo suficiente de aquí al 31 de agosto que es cuando comienza el europeo. Habrá que ver con Ibaka cuánto tarda. De momento la FEB ha anunciado que pondrá todo de su parte para conseguirlo.
Lo que está claro, porque así lo ha manifestado siempre que se le ha preguntado, es que Ibaka estaría encantado de enfundarse la roja para jugar con la Selección española. Eso sí, ha dejado claro que prisa tampoco tiene, "jugar ya con la Selección es algo que me gustaría, pero tal vez sea pronto. Esto es algo con lo que yo soñaba y espero que llegue pronto y salga todo bien".
Sobre lo que siente por nuestro país Ibaka no tiene dudas, "para mí España es como mi segunda casa. Me encanta. Siempre he dicho que aquí estoy para trabajar, y España está para vivir. Trabajo aquí siete meses y después voy a la que es mi segunda casa, tras el Congo. Viviría en España toda mi vida".
Estas declaraciones las realizó antes del partido que les enfrentaba a los Lakers en el Staples Center, en el que perdió su equipo por 101-94, y donde se encontró con un Pau Gasol que vería con muy buenos ojos la llegada del congoleño a la Selección, "es un jugador con mucho talento, buenas habilidades para jugar y sin duda podría contribuir de manera positiva para el equipo".
La verdad es que la evolución de Serge Ibaka esta temporada en la NBA es notable. Ha ganado a pulso mucho más protagonismo en el juego interior de los Thunder y ha pasado a promediar 9,8 puntos y 6,7 rebotes en los más de 26 minutos que está en pista. Por todo ello se ha convertido en un jugador muy atractivo para completar el plantel español.
Por otro lado, Ibaka quiso hablar sobre su próxima participación en el concurso de mates del All Star que se disputará en febrero en Los Ángeles, "es algo para disfrutar y pasarlo bien. Quiero hacer un show para los fans, que es algo que a todo el mundo le gusta hacer. Estoy pensando ya en preparar algunas cosas pero de momento no las he practicado; quizá empiece esta semana ya a entrenar algunas cosas".
Por el momento seguiremos disfrutando con su juego y sus mates y esperando que todos los trámites lleguen a buen puerto a tiempo para poder verlo de rojo este verano por tierras lituanas.
Una vez conseguida la partida de nacimiento la FEB tiene previsto presentar este mismo martes todos los documentos necesarios para lograr que Ibaka se convierta en ciudadano español por el proceso de carta de naturaleza que otorga el Gobierno mediante Real Decreto en circunstancias excepcionales.
A partir de ahí comenzará todo un baile de papeleos y entresijos burocráticos como entrevistas personales con el ala-pívot congoleño. Además, Ibaka debería jurar la Constitución española. El principal problema al que se enfrentan es el tiempo. La idea es que Ibaka pueda estar disponible para Scariolo para el próximo europeo de Lituania que se disputará este verano.
Todo este proceso no tiene un plazo fijo y varía en cada caso y jugador. Por ejemplo, con el madridista Nikola Mirotic se tardaron dos años hasta conseguirlo. Aunque hay motivos para la esperanza porque en el caso de Sancho Lyttle, jugadora del Permuferías Avenida, la nacionalización se demoró algo más de medio año, tiempo suficiente de aquí al 31 de agosto que es cuando comienza el europeo. Habrá que ver con Ibaka cuánto tarda. De momento la FEB ha anunciado que pondrá todo de su parte para conseguirlo.
Lo que está claro, porque así lo ha manifestado siempre que se le ha preguntado, es que Ibaka estaría encantado de enfundarse la roja para jugar con la Selección española. Eso sí, ha dejado claro que prisa tampoco tiene, "jugar ya con la Selección es algo que me gustaría, pero tal vez sea pronto. Esto es algo con lo que yo soñaba y espero que llegue pronto y salga todo bien".
Sobre lo que siente por nuestro país Ibaka no tiene dudas, "para mí España es como mi segunda casa. Me encanta. Siempre he dicho que aquí estoy para trabajar, y España está para vivir. Trabajo aquí siete meses y después voy a la que es mi segunda casa, tras el Congo. Viviría en España toda mi vida".
Estas declaraciones las realizó antes del partido que les enfrentaba a los Lakers en el Staples Center, en el que perdió su equipo por 101-94, y donde se encontró con un Pau Gasol que vería con muy buenos ojos la llegada del congoleño a la Selección, "es un jugador con mucho talento, buenas habilidades para jugar y sin duda podría contribuir de manera positiva para el equipo".
La verdad es que la evolución de Serge Ibaka esta temporada en la NBA es notable. Ha ganado a pulso mucho más protagonismo en el juego interior de los Thunder y ha pasado a promediar 9,8 puntos y 6,7 rebotes en los más de 26 minutos que está en pista. Por todo ello se ha convertido en un jugador muy atractivo para completar el plantel español.
Por otro lado, Ibaka quiso hablar sobre su próxima participación en el concurso de mates del All Star que se disputará en febrero en Los Ángeles, "es algo para disfrutar y pasarlo bien. Quiero hacer un show para los fans, que es algo que a todo el mundo le gusta hacer. Estoy pensando ya en preparar algunas cosas pero de momento no las he practicado; quizá empiece esta semana ya a entrenar algunas cosas".
Por el momento seguiremos disfrutando con su juego y sus mates y esperando que todos los trámites lleguen a buen puerto a tiempo para poder verlo de rojo este verano por tierras lituanas.
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